Cerro Viejo: Volanta de supervivencia

Ruta aproximada realizada ese enero del 2008 en Cerro Viejo

Campamento de Supervivencia en Cerro Viejo

Mi primer ascenso

(Relato original en el blog de la comunidad)

Municipio de Tlajomulco de Zúñiga

Jalisco, México

Enero 2008 - January 2008

Punto de partida: El Molino

Punto final: Huejotitán

Clasificación QMX: T4D4x5 - Cv

Cerro Viejo visto desde El Molino

La ida al Cerro Viejo la propuse en una junta con los caminantes del grupo 9, miembros de la ASMAC. Desde los 8 años había deseado ascender este hermoso cerro y hasta ahora, muchos años después se cumplió. Después del Nevado y volcán de Colima, El Cerro Viejo es el mas alto del estado de Jalisco con casi los 3000 msnm, aunque la diferencia desde el punto mas bajo hasta la punta, queda unos pocos metros por debajo del Cerro de Tequila. En la parte baja predomina el bosque sub-caducifolio y espinozo, en la parte alta el bosque de encino. Por ser un lugar semi- virgen, hay una gran variedad de fauna, entre ellos, el lince o gato montés, venado, jabalí, entre muchos otros.

Sábado 12 de enero y estamos listos 14 personas, 6 mujeres y 8 hombres los cuales nos repartimos mandando a los mas livianos a la Voyager y al resto a la Grand Cherokee. Tomando la carretera que va a Jocotepec la Voyager se apaga y ya no quiere prender, por lo que se deja al primer grupo en El Molino que queda 6 km mas adelante y regresan por el segundo grupo. Posteriormente sabemos que la Voyager llegó a Guadalajara en grúa... a las 15:00 hrs.

Pueblo El Molino, Jocotepec

En el Molino preguntamos a una maestra que vive en una casa, casi en la curva de la carretera, y nos dice por donde cruzar el pueblo mas rápidamente para iniciar el ascenso. Nos tomamos la foto del recuerdo del "antes", hacemos la oración y a caminar guiados una de las damas.

Capullo en bosque espinoso

Durante los primeros kilómetros pasamos vegetación de arbustos espinosos algunas plantas de hojas caducas, mezquites y algunos pocos encinos. La vegetación poco densa nos permitió caminar en general a gusto. Algunos empezaron a probar algunas hojas y flores como alimento. Uno de los caminantes se come a la primer hormiga y yo la segunda. La siguiente foto nos muestra al pié de un árbol del que pudimos haber tomado muchas provisiones y que por nuestra ignorancia los dejamos!!!

Ascendiendo el Cerro Viejo por El Molino

En el km 2.5 hicimos nuestro primer descanso formal; dirán a lo mejor que que poco aguante, pero para un grupo de 14 personas donde van desde muy experimentados hasta algunos con poca experiencia en caminatas no está tan mal...

Fruto a 1779 msnm en el Cerro Viejo

El cielo nublado nos permitió sentarnos unos momentos a todo dar. La fauna que hasta ahora hemos visto son caballos, sus crías y algunas aves predadoras solamente. El suelo quebradizo en algunas partes muestra sequía ahora y mucho lodo en meses anteriores. Las pisadas de caballos y ganado se ve en algunas zonas.

Otra chava dirge y la pendiente comienza a ponerse interesante, y nuestra velocidad promedio baja a 1.5 km/h o menos. Rodeamos un pequeño cerro con bosque de encino y llegamos a un valle entre este y las faldas, antes de llegar a la costilla del Cerro Viejo. Pocos metros adelante con una pendiente de 45º todos piden otro descanso, comienzan a quejarse algunos y se nota en la cantidad de agua que toman. Se ponen al frente otros dos caminantes.

Cactácea a 1850 msnm en el Cerro Viejo

Me creo un sermón motivador y los convenzo de llegar lo mas pronto posible a la costilla. Sigue la pendiente muy pronunciada pero por fin se llega a donde queríamos pero... pues el cerro mide 2960 msnm y estamos apenas a 1850 aproximadamente. Ahora voy yo por delante y seguimos avanzando con una pendiente menor a un lado de la barda de piedra que divide... no sabemos si algún municipio o propiedad privada simplemente. Empiezan a resentir la subida algunos caminantes y me voy hasta atrás a darles ánimos.

Se empieza a ver indicios de que el bosque sub caducifolio va a quedar atrás y que vamos a iniciar con el bosque de encinos.

Ya en la costilla del cerro volvimos a descansar 2 km adelante, donde encontramos nopales tiernos en la barda de piedra y nos los comimos, quedando algunos aguatados. De lo que encontramos para comer en el cerro los nopales fue lo mas sabroso. Intentamos hacer lo mismo con un maguey, pero oh Dios!!! que asqueroso sabe!!

Cara sureste del Cerro Viejo

Un kilómetro adelante, después de que terminase la barda de piedra, nos tocó ver un venado y luego un felino, que estaba grande para ser un gato montés. Aún con esta emoción de verlos, el cansancio siguió haciendo de las suyas...

Llegamos muy cerca de lo que nosotros creíamos que era la parte mas alta del cerro; es increíble lo que el cansancio te hace creer!!! Descansamos 20 minutos y nos pusimos a preparar la zona de fogata, las damas levantaron su refugio y los hombres acomodaron sus bolsas de dormir en una hondonada. Las actividades nocturnas fueron: átomos, acecho, y la fogata, la cual estuvo muy alegre y participativa.

La fogata estuvo sonorizada por la pelusa, el pato, un limón medio limón, la granja, la papaya, la punta del pié, el mango, canciones con una palabra determinada, mmm, una canción que iba ba-badabada-badabadaba badabada badabada badaba... y unas representaciones cómicas acerca de algún valor humano y que puedo contar casi a punto de llorar, jaja.

Al terminar la fogata, unos caminantes se quedaron a observar las estrellas un cuarto de hora y alrededor de las 10:00 pm nos fuimos a descansar. Al acostarnos, el agua ya estaba peligrosamente escaseando debido a la mala administración de la misma por parte de los caminantes. La mayoría no buscó alimento extra pensando que al día siguiente íbamos a saborear una rica comida en el pueblo de Huejotitán...

Paisaje en el Cerro Viejo

El domingo 13 nos despertamos a las 7:00 hrs, después de hacer ejercicio desayunamos. Los caminantes empezaron a guardar sus cosas y a dejar el lugar de la fogata como si nunca se hubiera hecho una. Algunos de nosotros subimos mas con la intención de llegar a la punta, pero avanzamos alrededor de 1 kilómetro y como suele pasar, crees que llegaste a la punta y hay mas...

Yo me aventuré un poco y me emocioné fotos a unos cuatis o tlacoaches, y seguí. Estuve a menos de 1 km de la punta y decidí regresar por la hora. De regreso al campamento, ya estaban ahí todos terminando algunos detalles para emprender el descenso. Todos hablábamos de lo que íbamos a comer en el pueblo; muy temprano se había escuchado que en la plaza del pueblo de Huejotitán harían jugos de zanahoria y naranja... que rico!!! Pero por lo pronto solo uno de los supervivientes se comió una chinche o jumil que supo a medicina, uac!!

Cuatie en el Cerro Viejo

A las 10:10 comenzamos a caminar por donde habíamos llegado un día anterior, el propósito era llegar hasta donde daba vuelta hacía el este un camino en desuso y que donde según el mapa había una vereda para bajar al oeste a dos km del pueblo de Huejotitán. Eran aproximadamente 7 u 8 kilómetros... fácil!! y en unas cuatro horas, tomando en cuenta la bajada por el bosque subcaducifolio y con una pendiente de 45º.

Llegando al lugar indicado, Tres de los caminantes exploraron un poco en los alrededores haber si se veía la vereda, pero no encontraron nada. Estuvimos a punto de seguir el camino hasta el Molino, pero todos fueron retachados para "hacer un camino donde no lo hay".

Ave en Cerro Viejo

Todos nos pasamos una cuerda de 1/3 de pulgada por el cinturón y algunas hebillas, intercalándolos hombre y mujer a excepción del frente donde iban dos hombres para abrir el camino. Y empieza nuestro calvario y la parte del campamento que muy difícilmente podremos olvidar.

Entre quejas de falta de cuerda, caídas y jalones empezamos a caminar atreves del bosque subcaduciflio. No habíamos avanzado 50 metros cuando nos encontramos con la primer pendiente mayor de 45º. Un chavo se tuvo que salir de la línea ya que había cargado por unos instantes a dos personas al mismo tiempo lastimándose su hombro y se pasó atrás.

Entre mas avanzábamos, mas tierra nos entraba entre los pantalones y en las bolsas, nuestra cara empezaba a hacerse irreconocible por el exceso de mugre. Nos atorábamos con lianas, nos golpeábamos con las piedras que caían por el movimiento que hacían los de mas arriba. Nuestros labios se veían morados por la combinación de tierra y saliva.

Maguey en el Cerro Viejo

De las 14:00 hrs, que era la hora en que pensábamos estar abajo, se fue recorriendo cada hora que avanzábamos solo algunas decenas de metros. Cuando llegamos a una parte donde había un bosque de cactos empezó a notarse mas la desesperación de algunos y algunas caminantes. De por si ya estábamos fastidiados por algunos que no paraban de mencionar la mediocre frase de "si hubiéramos hecho..." Hubo algunas discusiones que no pasaron de ahí y seguimos.

Metros adelante me salí de la línea y me pasó al frente después de que se quitara la cuerda el que iba adelante para ver como pasaríamos una parte muy empinada. Una chava se había desmayado una vez por falta de agua. Un chavo cayó dos metros y no pasó nada gracias a Dios. Fuimos pasando uno por uno un bosque de cactos y plantas caducifolias con baja densidad de población pero con pendientes pronunciadas, que sumándole la sed y hambre se complicaron.

Me volví a adelantar para abrir camino por una cañada, avancé 70 metros y llegué a un risco de 4 o 5 metros. Me regresé y empecé a abrir camino rodeando el cerro sin bajar mas. Treinta metros adelante paramos. Los que venían atrás avisaron que se había desmayado la chava de nuevo, otras estaban llorando y a otra le había picado una avispa y era alérgica. La encargada de las damas habló inmediatamente a protección civil; otro chavo hacía lo mismo, y le llamamos la atención todos cuando dijo: estábamos perdidos!! Nooo, solo no podemos bajar mas!!!

Y era cierto y con orgullo!!. Con una desmayada, otra con el brazo hinchado y con problemas para respirar ya no podíamos avanzar mas. Hubo pequeñas discusiones con los caminantes que se quejaron de las chavas. Nos pudimos contactar con el responsable de esperarnos abajo y con el papá de uno de los caminantes, los cuales, junto con otros papás ya habían llegado al pueblo a esperarnos. Cuando supieron nuestra situación fueron a buscarnos. Tres caminantes avanzaron 50 metros mas para llamar la atención con un silbato y un espejo; resultó.

A la hora y media ya nos habían ubicado. Los de protección civil no nos ubicaron durante varias horas. Las coordenadas aproximadas los confundieron un poco y no vieron el espejo. Para esto ya uno de los caminantes había tomado su orina por la sed.

Situación crítica en Cerro Viejo

Realizamos y recibimos decenas de llamadas. En menos de dos horas ya sabían la mayoría de los papás nuestra situación y decidieron ir a esperarnos al pié del cerro. Se agregaron ambulancias, protección civil y patrullas que llegaron posteriormente.

Tres o cuatro horas después, alrededor de las 17:00 hrs. nos volvimos a comunicar y ubicar con ayuda de silbatazos, por lo que se mandó al primer grupo de caminantes a su encuentro...

El jefe de grupo, por medio de gritos, iba guiando por donde irse a los primeros dos que comenzaron a bajar, para que evitaran los acantilados. Enseguida comenzaron a bajar otros tres caminantes mas. La pendiente seguía siendo al menos de 35º.

Un caminante ya me había encargado se asegurarme que los de protección civil lo llevaran salvo hasta su casa y que no se le olvidara su mochila; estaba deshidratado y ya no podía seguir... Pero cuando se enteró de que ya estaban empezando a bajar y que había comida y agua al pié del cerro, agarró fuerzas de no sé donde e inició también de nuevo el descenso junto con otras tres personas.

Una chava, estaba delirando buscando un ojo que se le había perdido, y nuestra otra amiga estaba superando el piquete de avispa poco a poco y ya podía respirar mejor. Dos chavas y yo estábamos bien.. aún, y nos quedamos con ellas.

Viendo que ya estaba anocheciendo, y con la respuesta de nuestra amiga tuerta, que intentaría caminar para acercarnos al punto donde empezaron a bajar los demás, decidimos avanzar con la cuerda de 1/3 de pulgada. Todas hicieron un gran esfuerzo, la encargada de las damas se fue al frente y cayó la noche rápidamente.

Anocheciendo en Cerro Viejo

Habíamos avanzado 150 metros y sufrimos algunas pequeñas caídas. Al notarse el tono de voz de la que iba al frente, al resbalar de repente, fue suficiente para decidir un descanso permanente hasta que los de protección civil llegaran con agua por lo menos. Cinco metros adelante encontramos algunas partes parejas para descansar.

Al pasar las horas y escuchar gritos en la parte baja del cerro y además de confirmar mediante llamadas al celular, nos percatamos que no habían llegado los demás al pié del cerro por lo que aumentó la preocupación.

Viendo las circunstancias no hubo mas que tomar la decisión de dormir en el lugar donde nos encontrábamos con la esperanza de que nos llevaran agua por lo menos.

El lugar mas cómodo fué para nuestra amiga tuerta, otra chava descansó 4 metros mas arriba sobre una piedra grande, otra amiga después de un buen rato se pudo acomodar por fin sin que se resbalara por la pendiente. La encargada de las chavas se quedó con nuestra amiga tuerta para cuidarla, mientras, prendimos una fogata para que nos ubicaran pero no sirvió de mucho. Al estar tomando unas fotos se nos ocurrió que a lo mejor el flash de la cámara... A los 5 minutos nos dijeron que las personas del pueblo ya habían ubicado el lugar donde nos encontrábamos y que al día siguiente a las 6:00 hrs iniciarían el ascenso hacía nosotros acompañados de mas amigos de nosotros que habían ido en nuestra ayuda.

Entre 1:00 y 2:00 de la madrugada nos confirmaron que todos los que habían bajado, 9 en total, estaban bien con los papás del grupo, por lo que nos acostamos mas tranquilos no sin antes hacer una oración abierta a petición de la picada por la avispa.

Aún después de que los 9 llegaron a sus casas, los papás de ellos siguieron al tanto de los que nos habíamos quedado y ya habían ofrecido oraciones, misas y demás... Gracias!!!

Durmiendo en Cerro Viejo

El hecho de despertar y ver que se empieza a aclarar el cielo nos dió gusto. Nuestra amiga tuerta amaneció mejor y con su ojo recuperado y sin recordar lo que había pasado el día anterior desde las 16:00 hrs. Recibimos varias llamadas de ánimo por parte de algunos papás y personas del grupo, una de ellas confirmaba el ascenso de personas del pueblo de Huejotitán!! Cuando nos dijeron eso, la pregunta inmediata fue ¿traen agua?????

Aproveché para ir por el botiquín que habíamos dejado 150 metros atrás. A los pocos minutos de que regresé vimos a dos personas del pueblo que muy amablemente nos esperaron a arreglar nuestras cosas para bajar. Uno de ellos ayudó a la que perdió el ojo temporalmente y los demás bajamos por nosotros mismos. El otro señor iba adelante indicándonos el camino. Veinticinco minutos mas tarde nos encontramos a otros amigos que traían agua, naranja y seven si mal no recuerdo; que sabroso!!!!

Al llegar a una cañada, único lugar por donde se podía bajar, ya estaba el personal de protección civil, personas del pueblo y el delegado con cuerdas para apoyarnos. Todavía hubo caídas leves y por poco una piedra de mas de 100 kilos nos golpea al no poder detenerla una amiga. Videl, uno de los jóvenes del Pueblo nos contó algunos detalles (anécdotas) de los caminantes que bajaron el día anterior y como Iván (un pariente de él) había caído varios metros ayer.

El resto del trayecto fue mas alegre y empezábamos a reir de lo que nos había pasado. Los familiares y gente del grupo preguntaban por nosotros por el radio. Por fin, alrededor de las 11:40 hrs llegamos hasta un cultivo de magueyes, donde nos encontramos con algunos papás y dirigentes del grupo. Hubo abrazos y nos invitaron a comer; no sin antes hacer la oración de acción de gracias por haber llegado.

En la ambulancia revisaron a algunos compañeros. Protección Civil de Jocotepec nos pidió los datos y me llamaron la atención por no avisarles, jeje. Gente muy amable del pueblo preparó comida y todos los que participamos de esta aventura, incluyendo a los que nos estaban esperando abajo a excepción de los chavos que ya habían regresado a sus casas en la madrugada, nos dispusimos a ingerir los sagrados alimentos.. bueno tragamos y bebimos como si no hubiéramos comido en tres días.

Quedamos cordialmente invitados a regresar a un día de campo por parte de la gente del Pueblo y esperamos tomarles la palabra lo mas pronto posible. A las 13:10 regresamos a Guadalajara terminando así la ejecución de un proyecto de supervivencia con una experiencia que difícilmente se nos olvidará. 

Posterior a esta aventura hubo algunas reuniones mas para compartir nuestras experiencias y otras para agradecer a las personas que nos apoyaron, pero eso es otra historia.