Junio 2009, en la carretera Tala - Navajas
Sábado de junio en la central vieja, 8:15 horas y solo dos del primer equipo. Cinco minutos después entramos a comprar los boletos, $32 por persona para el camión en el carril C2 que salia rumbo a Tala... ya! A los diez minutos nos habla el que no llegó, 15 minutos después estaba con nosotros en el transporte foráneo, justó en la esquina de la avenida 8 de Julio y Lázaro Cárdenas. A las 10:08 nos bajamos en la entrada del pueblo, compramos cuerda de henequén y comenzamos a caminar para pedir un aventón. Compramos un kilo de uvas verdes y rojas, $25 ni modo, se nos antojaron... No se para nadie y seguimos caminando por otros cientos de metros. Por fin, una camioneta blanca de los 80´s nos levanta y nos deja en el siguiente pueblo, San Juan de los Arcos.
Otros diez minutos y de nuevo estábamos en otra camioneta en un estado parecido a la anterior. Nos dieron datos de por donde se puede subir El Cerro Montenegro por Ahuisculco. También nos comentaron de las cuevas y un río antes de llegar a este pueblo, probablemente el lugar es el conocido como "El Chapuzón"... hace 9 años que no voy ahí. En Ahuisculco tomamos el último aventón, El Señor Memin, minusválido manejando un carrazo también de los 80´s, solo su pié izquierdo para frenar y acelerar, sus muletas lo acompañan en el asiento del copiloto y nos cuenta que se dedica a instalar alarmas. Nos deja en el entronque a Navajas, donde caminamos 1.2 kilómetros al pueblo donde buscamos la tienda y una paletería. Las personas que esperan el camión, nos hacen saber que los cuetones son en honor a San Antonio y que no tardaría en pasar la procesión que va al pueblo vecino.
Pedimos informes de como llegar a las Casas Blancas, y comenzamos nuestra volanta. Al llegar a una pequeña plaza, recordé los puestos y las personas viéndonos como piezas de museo, igual que hace dos años... cuando cruzamos la sierra de Cuisillos siguiendo la ruta Navajas - Camichines.
En las orillas del pueblo de Navajas encontramos una pequeña ave lastimada sobre el suelo caliente. Inmediatamente sentimos la mirada y les encargamos el ave a los mirones.
Pocos minutos después dimos con la brecha que nos acercaría a nuestra salida hacia la sierra, donde nos esperaría una caminata de pocos kilómetros, pero con el sol a todo su esplendor y sin llover aún en esta zona, pasando por bosque espinoso, subcaducifolio y de encinos.
Junio 2009, La cueva de los murciélagos
En vez de seguir a las casas blancas, nos desviamos hacia el Cerro el Barrigón siguiendo otra brecha , la cual nos llevaba por algunos tiraderos de basura hasta que encontramos algunas personas en una parcela y les preguntamos por la ruta a seguir para llegar a Ahuisculco por la Sierra. Me dijeron lo que esperaba confirmar. Nos salimos de la brecha y caminamos por donde creíamos mas conveniente según la lectura del mapa topográfico del INEGI.
No había pasado muchos minutos y creí ver una cueva en el vértice de una pequeña cañada como a 200 metros de donde nos encontrábamos. Vimos el reloj, el segundo equipo iba a salir a las 14:30 horas por muy temprano; teníamos tiempo!